Carta de postres Nestlé: el fin del purismo

Recordar es vivir; y la mejor forma de hacerlo es regresar a esos lugares en los que uno se siente en casa. Nuema es uno de esos restaurantes versátiles, que funciona para una reunión de negocios o un encuentro con amigos, para reconectarse con la memoria de los sabores.
Como ya viene San Valentín, muchos lectores preguntan cuál es el mejor lugar para comer un postre. Hay muchas opciones, pero si quieren los mejores, Nuema los tiene. También tiene comida de sal increíble, pero los postres de este restaurante tienen algo especial.
Ir a Nuema es entender la revolución que está viviendo la cocina ecuatoriana. Los jóvenes impulsan un movimiento de reinvención de técnicas, sabores y sostenibilidad de ingredientes que demuestran que Ecuador puede ser un destino culinario, solo necesita que la chispa arda; incrementando la comunicación sobre esta innovación y educando al consumidor hacia la responsabilidad gastronómica.
Nuema es un restaurante de una pareja joven que enfoca su propuesta a la interpretación de los sabores ecuatorianos. Alejandro Chamorro es un chef con amplia trayectoria, incluso trabajó en 2014 en Noma, en Dinamarca, un restaurante con dos estrellas Michelín, que en el 2015 estuvo entre los tres mejores restaurantes del mundo. Para estar en ese lugar no se trata solo de tener comida perfecta, sino de tener una propuesta de valor y es lo que hace René Redzepi quien desarrolló una cocina de vanguardia nórdica, que se compromete con el uso de productos de los países escandinavos y que es fiel a las raíces, en platos sutiles y de delicada estética.
Precisamente ese sello se siente en Nuema. Chamorro interpreta la cocina ecuatoriana en sus creaciones con un estilo novedoso. Uno de sus platos insignia es la entrada Verde Corral: tortillas de plátano verde majado con queso, medallones de carne con una reducción de vino tinto y huevos de codorniz. Este plato es un homenaje a los sabores que Chamorro recuerda de su infancia, solo que transformó el concepto para darle vida a esa memoria.
La carta de Nuema tiene carnes, mariscos, risotto de quinua, entre otras opciones. Pero como la promesa de este texto son los postres vamos a hacer un recorrido dulce por Ecuador. Pía Salazar -esposa de Chamorro- interpreta los sabores dulces de Ecuador en texturas y deconstrucciones. Un dulce de tomate de árbol puede servirlo en capas con crema, gel, flores y tierra orgánica de chocolate para darle complejidad a esta preparación.
La verdad es que todos los postres de Nuema son increíbles.
Una gran cita en San Valentín es en Nuema. Hay que reservar, porque tiene pocas mesas. No se olviden de pedir el postre y endulzar la fecha más sosa del año.
Dirección: República del Salvador y Suiza
Presupuesto: USD 25 promedio por persona
El pastel inglés, por decirlo así, se llama pie o tarta. Tradicionalmente se compone por una corteza de masa, rellena de fruta y encima lleva una capa delgada o cintas de la misma masa. También puede ser merengue como el tradicional pie de limón u otras variedades ácidas como el maracuyá y taxo (curuba en Colombia).
En Quito varios lugares lo ofrecen en diferentes formas y versiones. Nuestra audiencia pidió una lista de dónde comer las mejores variedades y así surgió este listado.
1) Lucia Pie House and Grill: En este lugar podría hacerse un solo ranking de sus pies por la variedad que tiene, ya que oferta más de 12 sabores como: manzana, piña, cereza, limón, maracuyá, pecan (foto), entre otros. Este restaurante tiene platos fuertes increíbles, después de comer uno de ellos es un pecado no degustar sus pies.
2) Urko: Su cocina contemporánea con ingredientes locales enamora y su tarta es prueba de ello. Es un cubo relleno con líquido de limón amazónico y acompañado por helado de chirimoya. La combinación de sabores y texturas es ‘urkoniana’ (un término acuñado por este blog para explicar lo que se siente al comer algo asombroso).
3) Jürgen: Sus pies son riquísimos y variados. Más de 100 años de experiencia en panadería se evidencian en sus tartas de fruta. ¿Recomendación? el pie de frutos rojos.
4) Cyril: Todos sabemos de la creatividad de este chef francés quien reside en Quito. Sus minitartas son prueba de ello. Hay variedad de sabores pero la de nougatine de pepa de cacao, compota de frambuesa y ganache de chocolate es asombrosa. Aunque no es un pie en el sentido estricto de la palabra, incluimos esta versión por darle un nuevo sentido a los sabores y texturas.
5) Sweet and Coffee: Su pie de limón tiene una corteza del tamaño perfecto (no muy gruesa), un relleno de cremoso y un merengue azucarado que combina a la perfección. Su especialidad no son las tartas, porque tienen variedad de postres, pero este pie les queda muy bien.